Noti Magazin

"Hoy los besos de Judas tienen mil formas:

una promesa rota, una mentira a escondidas, una amistad que se pisotea, un amor que se engaña.

Y lo más triste es que muchas veces… nosotros hemos sido ese Judas.

Hemos dado el beso.

Hemos fallado a quienes más nos amaban.

Y aún así… hay personas que no nos cerraron la puerta.

Que no gritaron, que no se vengaron, que no nos escupieron el nombre.

Nos siguieron amando.

¿Te ha pasado?

¿Has sentido la mirada limpia de alguien que debió alejarse de ti, y sin embargo… se quedó?

¿Alguien que, a pesar de tu traición, eligió el perdón?

Si es así, da gracias a Dios.

Porque esa persona aprendió del Maestro.

Porque su corazón —aunque humano y herido—

imitó a Jesús, que también recibió un beso de traición… y no dejó de amar.

Jesús sabía lo que Judas estaba haciendo.

Y no lo expuso. No lo humilló.

Lo miró con ternura.

Le lavó los pies.

Le ofreció el pan en la boca.

Y no dejó de amarlo.

Amó… al extremo.

Amó sabiendo.

Amó herido.

Amó hasta el final.

Y si alguien te amó así…

no fue porque no le doliera lo que hiciste.

Fue porque decidió seguir al Maestro,

porque vio en Él el ejemplo más grande:

que incluso el amor traicionado puede ser fiel.

Así que si tú diste un beso de traición…

y aún tienes a alguien que no dejó de amarte…

cuídalo.

Ámalo.

Y dale gracias a Dios por haber puesto en tu camino a alguien con un corazón tan lindo."